Un carro bomba explotó en la región tribal de Waziristán del Norte, matando a 14 militares y dejando 25 heridos. El grupo talibán Hafiz Gul Bahadur se atribuyó el ataque, pero las fuerzas paquistaníes señalan a Nueva Delhi como responsable indirecta
Al menos 14 soldados murieron y otras 25 personas, incluidos 10 civiles y varios niños, resultaron heridas el sábado tras un atentado suicida con un carro bomba en el distrito de Waziristán del Norte, en el noreste de Pakistán. El ataque se produjo en la localidad de Mir Ali, dentro de la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, una de las zonas más golpeadas por la violencia insurgente en el país.
Según un reporte preliminar del gobierno paquistaní, se usaron cerca de 800 kilogramos de explosivos, causando una potente explosión que provocó graves daños materiales y sembró el pánico entre la población local. A pesar de un toque de queda vigente en el distrito, el atentado logró ser ejecutado, lo que ha generado preocupación por la efectividad de las medidas de seguridad en la zona.
La facción talibán Hafiz Gul Bahadur, con fuerte presencia en el área fronteriza entre Pakistán y Afganistán, reivindicó la autoría del atentado. Sin embargo, horas después, el Ejército paquistaní emitió un comunicado acusando directamente a la India de haber orquestado el ataque a través del grupo insurgente Fitna al Khawarij, al que calificaron de “apoderado respaldado por Nueva Delhi”.
“Este atentado fue planeado y ejecutado por el Estado terrorista de la India”, aseguraron fuentes militares, mientras que el jefe del Ejército, el mariscal Asim Munir, prometió una “respuesta rápida y decisiva” ante cualquier intento de desestabilizar la nación.
Este nuevo episodio de violencia agrava aún más la ya tensa situación en la región, donde operan diversos grupos militantes islamistas. Islamabad sostiene que muchos de estos combatientes encuentran refugio en el vecino Afganistán, lo que Kabul ha negado reiteradamente.
Fuente: Rpp