Exdirector de Turismo, Manuel Quiñones, advirtió que conflictos sociales suscitados en Machu Picchu afectaron considerablemente el turismo en Puno y el sur del país
El empresario y exdirector regional de Turismo, Manuel Quiñones León, expresó su preocupación por la situación que atraviesa el sector turístico en el sur del Perú, especialmente en Puno y Cusco, regiones que dependen en gran medida de esta actividad económica.
En ese sentido, mencionó que las protestas y conflictos sociales suscitados en Machu Picchu semanas atrás, han generado un fuerte impacto en la llegada de visitantes nacionales y extranjeros.
“La actividad turística en todo el mundo es muy sensible a los fenómenos sociales. En Machu Picchu, por ejemplo, el reciente paro de transportistas afectó gravemente la temporada alta y hasta se habló de retirar el título de Maravilla del Mundo”, señaló.
Asimismo, reveló que países como Francia, Alemania, Japón y Bélgica habrían recomendado a sus ciudadanos no viajar a Puno, calificando a la región como “conflictiva” e “insegura”, lo que viene afectando directamente a los artesanos, guías y empresarios turísticos, que hoy enfrentan una caída sostenida en sus ingresos.
Finalmente, hizo un llamado a la unidad y reflexión, instando a la población puneña a cambiar de actitud y apostar por el diálogo como herramienta para el desarrollo y la recuperación del turismo regional.