Especialista advierte que cifras del crimen organizado en el Perú revelan un avance acelerado y preocupante


Crimen organizado

El economista César García advierte que el avance del narcotráfico, la extorsión y el contrabando en Perú supera al crecimiento de la economía formal, generando zonas de control del crimen organizado y debilitando la presencia del Estado

El economista César García, integrante de la Red de Estudios para el Desarrollo (REDES), advirtió que el Perú enfrenta un crecimiento alarmante de las economías ilegales, sustentado en cifras que evidencian la expansión del crimen organizado y la debilidad del Estado para contenerlo.

Señaló que, el país corre el riesgo de ingresar a un proceso de “centro americanización” debido al avance de actividades ilícitas como el narcotráfico, la extorsión y el contrabando, las cuales vienen creciendo más rápido que la economía formal. Explicó que, este fenómeno no es una percepción, sino una realidad respaldada por estadísticas recientes.

Por ejemplo: Tres de cada diez peruanos han sido víctimas de un delito en el último año, según la última encuesta del INEI; uno de cada diez ciudadanos sufrió más de un delito, lo que evidencia la repetición y escalada de la violencia; las denuncias por extorsión aumentaron más del 500% en los últimos cinco años, afectando especialmente a emprendedores y pequeños negocios.

Así mismo, en regiones como La Libertad, Piura, Lima y Puno, el crimen organizado ha logrado controlar zonas enteras, desplazando al Estado. Miles de comerciantes han decidido cerrar sus establecimientos por el cobro de cupos, mientras que el transporte informal ha crecido como consecuencia de amenazas y ataques.

“El crimen organizado se ha convertido en una fuente de ingresos para miles de personas. Cuando la economía formal no avanza, las economías ilícitas ocupan su lugar y crecen más rápido”, alertó y agregó que, la expansión del crimen está vinculada a la falta de presencia estatal en territorios vulnerables, donde los servicios públicos, la infraestructura y los programas de desarrollo son insuficientes.