Con una masiva participación, la noche de ayer se cumplió con la misa de la Solemnidad de la Natividad del Señor en la Basílica Menor de la Catedral de Puno, la misma estuvo presidida por el obispo de la Diócesis de Puno, monseñor Jorge Carrión Pavlich. En su homilía enfatizó que la paz significa la luz y el perdón de los pecados.
Asimismo, recordó que el recién nacido (niño Jesús) es el prometido y príncipe de la paz, “grande es el imperio y la paz no tiene fin en el trono de David”, indicó monseñor Jorge Carrión.
Asimismo, recordó que la buena voluntad de los hombres significa la determinación del hombre por la paz. El obispo de Puno, enfatizó que – los que hacen la paz, son hijos de dios, que ha logrado entender el verdadero sentido del nacimiento del niño Jesús.
Carrión Pavlich, recordó que es necesario en esta fiesta de la navidad, la determinación del hombre para buscar la paz. Aclaró que el nacimiento del niño Jesús significa la salvación del hombre que se resume en el amor de Dios hacia la humanidad, “es la realidad concentrada que da esperanza, alegría y futuro al hombre”, expresó el obispo de Puno.
Finalmente, dijo que debemos estar agradecidos por la gracia de Dios que reciben los hombres, “todos hemos sido bendecidos por su presencia”, acotó monseñor Jorge Carrión.
