Por: Jaime Calapuja Gómez
- Las rondas campesinas lograron detener a presunto feminicida de Rosa. El 26 de enero fue entregado a la justicia ordinaria, pero familiar teme que acusado sea liberado.
- El 2018, se registraron 7 mujeres fallecidas en la región. El pico más alto de muertes fue el año 2019 con 15 casos.
- En el año que inició la pandemia, 2020, la Defensoría del Pueblo pudo registrar 8 casos; mientras que, en el 2021 se identificó 5 casos.
“¡Qué va a ser de sus hijos de Rosa! ¡quién se va a responsabilizar de sus hijos” gritaba Marcela Gonzales Yanqui, presidenta de la Asociación Departamental de Mujeres Campesinas de Puno (ADEMUC), en la plaza de principal de Macusani, provincia de Carabaya, el pasado 19 de enero. Mujeres, organizaciones, esposos, niños, niñas de diferentes provincias arengaban pidiendo justicia para tres mujeres carabainas que habían sido asesinadas en los dos últimos meses.
En diciembre del 2021, fueron halladas sin vida Yeni Malaga Choquehuanca (22) y Milagros Molina Quispe (19). La primera, fue ubicada semidesnuda, con heridas cortantes, en el interior de la capilla de Oquepuño en la provincia de Carabaya. El Juzgado de Investigación Preparatoria dictó prisión preventiva de 9 meses en contra de Temis Alfredo Narváez Riquelme, presunto autor del delito.
El 21 de ese mes, Milagros Molina Quispe, natural de Ayapata, fue encontrada sin vida dentro de un hospedaje en la ciudad de Puno. La víctima estuvo en compañía de Roger Denilson Moachica Pilco, quien sería sospechoso y actualmente está en libertad.
En el presente año, Rosa Mendoza Ccasa (33), fue hallada sin vida por el sector Cumbre Tantamayo, en el distrito de San Gabán, provincia Carabaya. El principal sospechoso del asesinato es su pareja, Richard García Chislla, quien habría confesado su delito a las rondas campesinas.
La madre de la víctima, Gregoria Ccasa, en su idioma materno, el quechua, pidió ayuda a la población carabaina, para buscar justicia; también solicitó apoyo emocional y económico para atender a sus dos nietos, aun menores de edad.
Dirigiéndose a las rondas campesinas, exigió justicia para su hija; en tanto, duda de un juicio por la vía ordinaria. “No le entreguen a la policía, a la Fiscalía. Lo van a soltar al asesino y a su cómplice” dijo Gregoria.
Cabe resaltar que, el miércoles 26 de enero, los ronderos de la provincia de Carabaya entregaron al presunto feminicida a la Policía Nacional, Poder Judicial y el Ministerio Público. El presidente de las Rondas Campesinas de la región de Puno, Josué Guzmán Sacaca, recordó que, desde su captura, el acusado pasó a la custodia de justicia extraordinaria (cadena ronderil) en 10 distritos.
El rondero menciona que antes de detener al presunto asesino, Richard García, denunció la desaparición de su cónyuge en los medios locales, pero tras entrar en contradicciones, reconoció haberla quitado la vida. Tras el crimen, las rondas también detuvieron a la presunta cómplice, Agustina Sucapuca Mamani. Mientras que, están a la espera de la captura de un tercer individuo quien sería el autor material del delito.
Sin duda, la muerte de una madre de familia, conmocionó el norte de la región Puno. Lo ocurrido nos recordaba la estadística publicada por el Observatorio de Criminalidad del Ministerio Público, donde han registrado 556 mujeres peruanas asesinadas en la tipificación de feminicidio, en el periodo 2011-2015.
Con los altos índices de casos de feminicidio, permitió desde el año 2011, incorporar normativas, que terminaron con la Ley 30364, para prevenir, sancionar la violencia contra las mujeres y los integrantes del grupo familiar; sin embargo, las estadísticas de feminicidio en la región de Puno son latentes y muchos de ellos no se resuelven.
Por ejemplo, Serafín Calsín Pacompía, poblador de Carabaya y padre de familia de una mujer hallada sin vida el 07 setiembre del año 2018, refiere que su hija habría sido asesinada a golpes por su esposo Ever René Mollo, quien para eludir responsabilidades le habría echado producto tóxico con la intención cambiar la teoría del delito.
Señala que, ya han transcurrido 05 años de aquel fatídico hecho y hasta la fecha no encuentra justicia. “La justicia está totalmente corrompida en Carabaya y aquí en Puno, el fiscal de Juliaca está negociando la justicia”, dijo.
Para conocer más al detalle sobre los casos de feminicidio en la región, Onda Azul conversó con el jefe de la Defensoría del Pueblo en Puno, Jacinto Ticona Huaman. Compartió cifras alarmantes. Por ejemplo, en el año 2018 se registraron 7 mujeres fallecidas. El pico más alto de muertes en mujeres fue el año 2019, con 15 casos.
En el año que inició la pandemia, 2020, lograron registrar 8 casos, mientras que, en el 2021 se identificó 5 casos de feminicidio.
El representante de la defensoría, recuerda que, desde la aplicación de la Ley 30364, lograron la creación de 14 Instancias Distritales de Concertación para Prevenir y Erradicar la violencia hacia la mujer en la provincia de Puno entre los años 2019 y 2020. Mientras que en la región se logró su creación en las 13 provincias.
Menciona que, las instancias son conformadas por la alcaldía, Fiscalía, Poder Judicial, Policía, instituciones educativas, centros de salud, subprefecto, y otros agentes que buscan la paz social. Si bien no se pone en práctica el plan de trabajo, espera que en el breve tiempo se desarrollen actividades de prevención y sanción.
