Carlos Miguel, señaló que como creyentes debemos tener la fuerza de nuestro padre celestial, que tiene el poder de cambiar a las personas. “Dios cambia los corazones”, dijo.
El sacerdote de la Diócesis San Carlos Borromeo de Puno, Carlos Miguel Mestanza, hablo sobre el amor verdadero de Dios, el cual en muchas ocasiones ha llevado a visibilizar a los seres humanos los milagros más grandes, principalmente el milagro de la transformación de una persona que deja todo para seguir el camino de Dios.
Así mismo, reflexionó que, como creyentes debemos tener siempre presente la inmensa fuerza de nuestro padre celestial, que tiene el poder de cambiar a las personas, reivindicarlos y convertirlos en hombres de bien, realizando acciones en beneficio de la humanidad.
“Todos han tenido la experiencia de acercamiento con Dios, en algún momento de nuestras vidas, y algunos se han quedado con esa experiencia durante sus vidas y el amor tan puro que se siente esa presencia divina es la que hace que una persona tenga este cambio tan radical en su vida”, refirió.
En la misma línea, enfatizó que, para que exista un cambio en la vida de alguien, esa persona debe estar dispuesta a ese cambio, además de tener presente que el cambio no es automático. Dios cambia los corazones, pero requiere un proceso de constante decisión por hacer el bien.