Ministro de Agricultura afirma que metales pesados “no contaminan a las plantas, sino que las nutren”


Metales pesados

Ángel Manero respondió ante críticas por la falta de control del Senasa en zonas donde se usa agua con metales pesados para riego; especialistas y autoridades locales cuestionan sus declaraciones

El ministro de Desarrollo Agrario y Riego, Ángel Manero Campos, generó controversia al afirmar que los metales pesados presentes en el agua no contaminan a las plantas, sino que actúan como nutrientes. Sus declaraciones se dieron en la Comisión de Presupuesto del Congreso, en respuesta a cuestionamientos de la congresista Kelly Portalatino, quien criticó la inacción del Senasa ante la problemática de contaminación con metales pesados en la región Áncash.

“Los metales en el agua funcionan como nutrientes para las plantas, no las contaminan. Hablar de contaminación en productos agrícolas es irresponsable porque podría cerrar mercados y perjudicar a los productores”, sostuvo el ministro. También minimizó el riesgo al afirmar que solo habría preocupación en caso de intoxicaciones graves con mercurio o arsénico, que, según dijo, serían advertidas por la Autoridad Nacional del Agua (ANA).

Estas declaraciones fueron duramente cuestionadas por Portalatino, quien recordó que hay más de 200 personas contaminadas por arsénico y plomo en Áncash, y denunció la falta de presencia del Senasa en las reuniones clave sobre la problemática.

Diversos informes, como el del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), han detectado fuentes posibles de partículas contaminantes cerca de instalaciones mineras en Huarmey. A ello se suma un reciente análisis de especiación realizado en Chile, que confirmó la presencia de arsénico inorgánico, altamente tóxico y cancerígeno, en 50 pobladores de esta provincia.

Mientras tanto, las autoridades sanitarias y agrícolas aún no realizan un tamizaje general a la población ni análisis de productos agrícolas o animales en la zona, pese a los evidentes riesgos. La ciudadanía exige respuestas concretas y acciones inmediatas frente a una crisis ambiental y de salud pública que lleva años sin atención efectiva.