Este martes la Asociación Latinoamericana de Educación y Comunicación Popular (ALER) saluda a las mujeres del continente y Caribe Abya Yala, especialmente en homenaje a los múltiples testimonios de lucha comprometida desde las resistencias y reexistencias en favor de la vida digna. Nos sumamos al llamado urgente a los Estados para el cumplimiento de los derechos de las mujeres, en respeto a una vida libre de violencia de todo tipo.
En el documento se lee, reconocemos que, la pandemia puso en evidencia la desigualdad que atravesamos en nuestros territorios, donde las mujeres siguen siendo víctimas de la precarización laboral, subempleo, cambio climático, brecha digital, invisibilización del trabajo doméstico, trabajo de cuidado no remunerado y la exclusión educativa; urge que estas condiciones cambien cuanto antes.
Una sociedad democrática inclusiva y sin discriminación solamente es posible si se concreta la equidad de género, y esto implica un compromiso más firme con la diversidad de demandas, contextos y propuestas que surgen de las propias comunidades con activa participación de las mujeres.
El modelo capitalista muestra grietas profundas de sus propias contradicciones con aspiraciones de vida inalcanzables para la mayoría de la población. La falsa promesa de progreso se fundamenta en las violencias
extractivistas, de depredación de la naturaleza, y otras muestras de poderes patriarcales y coloniales que sufren nuestros pueblos. Por ello rechazamos las políticas neoliberales, mercantilistas de la vida, privatistas y de endeudamiento público que amenaza con retroceder la conquista social de derechos que colectivamente hemos defendido hasta ahora, especialmente marginalizando a las mujeres.
Nuestro posicionamiento en favor de los Buenos Vivires desea sumar alternativas al desarrollo, pasando por el compromiso sostenible con la vida digna en lo público y lo privado, por lo que exigimos mayor garantía de los
Estados en la protección de los derechos, así como mayor acompañamiento de las organizaciones y movimientos sociales para la construcción de futuros éticamente posibles con justicia social en los ámbitos institucionales, públicos y cotidianos.
Fuente: ALER