Docentes cesantes y jubilados de la UNA Puno exigen ejecución de una sentencia de 2008 que ordena la homologación de remuneraciones y el recálculo de pensiones, tras años de retrasos y falta de atención por parte de las autoridades universitarias
Un grupo de docentes cesantes y jubilados de la Universidad Nacional del Altiplano (UNA) de Puno llegó esta mañana al rectorado para exigir el cumplimiento de una sentencia judicial emitida en 2008, que ordena la homologación de sus remuneraciones y el recálculo de sus pensiones; sin embargo, señalaron que ninguna autoridad universitaria se encontraba en el lugar para atenderlos.
Don Rogelio, uno de los representantes, explicó que la deuda se arrastra desde la vigencia de la Ley Universitaria de 1983 y que, pese a múltiples gestiones en la universidad, el Ministerio de Economía y Finanzas e incluso el Congreso, la institución nunca cumplió con actualizar sus pensiones ni con reconocer los adeudos. “Inicialmente fueron 69 docentes los que iniciaron el proceso, pero 25 fallecieron en el camino; actualmente quedan 45 beneficiarios y 10 viudas con derecho adquirido”, dijo.
Indicaron que, el proceso atravesó apelaciones, nulidades y nuevos peritajes judiciales, hasta que recientemente se aprobó el último informe técnico que determina los montos pendientes y que, pese a que el AIR ya fue autorizado este año, la universidad no realiza las modificaciones presupuestarias necesarias para ejecutar el pago, pese a que una ley vigente desde el 6 de noviembre habilita estas transferencias.“No hay voluntad. No somos considerados prioritarios, a pesar de ser adultos mayores, pedimos que las autoridades universitarias cumplan con la sentencia casatoria y con el pago mensual actualizado de sus pensiones”, expresaron.