Yolanda Cornejo, artesana acreditada en la ciudad de Lima, indicó que, la pandemia ha inmovilizado a la ciudadanía, trayendo consigo el caos económico para muchas familias a nivel regional, nacional e internacional y en la actualidad la crisis política y social en el país está imposibilitando la reconexión comercial principalmente del sector turismo.
Precisó que, una de las grandes dificultades para los artesanos, sería la falta de los espacios de venta, pese a que, Puno es una de las regiones con mayor cantidad y variedad de artesanía en cerámica, tejidos, tallados en piedra, mascarería y otros, donde deben jugar un papel muy importante MINCETUR y la DIRCETUR.
Consideró que, las sedes regionales no siempre han dado buenos resultados, a pesar de que hay mucho por trabajar, entre ellos: para evitar ser intermediarios porque no permite reconocer el trabajo del artesano, donde se realiza un trabajo 100% manual y un 60% de artesanas de comunidades necesitan ayuda con maquinarias.
Recomendó a las autoridades del Gobierno Regional de Puno, provincial y distritales a realizar alianzas con municipios distritales (Jesús María, Miraflores, Lince, Ate y otros) de la ciudad de Lima, para que los trabajos de artesanía se vendan directamente, así como la exportación al extranjero. Además de la creación de un museo de artesanía.
