De las 13 cuencas que conforman la vertiente del lago Titicaca, 9 se encuentran contaminadas, afirmó José Bayardo director ejecutivo de Derechos Humanos y Medio Ambiente – DHUMA. “Esto significa que más del 50% de las cuencas de Puno se encuentran contaminadas” mencionó.
Lamenta que la mayoría de cuencas contaminadas son por actividades extractivas que se ubican en las cabeceras de cuenca media, cuenca baja y el lago Titicaca.
Respecto al caso de la microcuenca de Jatun Ayllu y la subcuenca de Llallimayo, lamenta que actualmente siga contaminada por la extracción de oro de la minera Aruntani SAC. Tras un balance a los 12 años de operación minera, afirma que hay un impacto considerable al medio ambiente y la salud de la población que vive en su entorno.
Agregó que, en la cuenca Llallimayo se prevé el cierre de mina hasta el año 2026, pero presume que la empresa no va a resarcir los daños ambientales generados.
“El plan de cierre, se supone que es una intervención para reponer el impacto tal cual como lo ha encontrado. Pero la empresa lo está utilizando para continuar extrayendo. Este hecho enardece a la población, porque no se cumple el estudio impacto ambiental y plan de cierre” dijo.