Representantes vecinales advierten incumplimientos, abandono de obras y documentos falsos en licitaciones, y exigen transparencia tras más de 40 años de espera por el servicio.
Andrés Avelino Carlos Visa, representante de 35 urbanizaciones de la Zona Noroeste de la Salida a Cusco, margen izquierdo, sector III, informó en Radio Onda Azul que el último viernes participaron de una reunión en Lima con el nuevo ministro de Vivienda, donde se aseguró que el proyecto de agua y desagüe para Juliaca no se detendrá; sin embargo, persisten las dudas debido al historial de incumplimientos.
Según explicó, la Oficina de Supervisión de Proyectos (OSP) habría incumplido cronogramas, modificando su Manual de Operaciones y, además, presuntamente usurpando funciones que correspondían al PNSU en el proceso de licitación.
Precisó que la empresa a cargo de la etapa 1, Covanor, abandonó la obra, mientras que la etapa 4 volvió a “hoja cero” debido a que el único postor presentado en junio habría entregado documentación falsa.
Recordó además que el Estado peruano informó que el 25 de noviembre se firmaría el contrato para la ejecución de la etapa 2, que la etapa 1 debería culminar el 20 de diciembre, y que la etapa 3 se adjudicará el 17 de diciembre, con contrato previsto para el 30 de enero del 2025. A pesar de estos anuncios, dijo que los plazos siguen siendo tentativos y que incluso en la reunión se impidió a los dirigentes registrar información con celulares y se limitó el tiempo de intervención.
En la misma línea cuestionó además que algunos funcionarios de la OSP no habrían cumplido sus funciones, señalando que Contraloría detectó la ausencia de cuadernos de obra y posibles irregularidades en el manejo de materiales. Frente a ello, anunciaron que esperarán informes de Contraloría, Fiscalía y Defensoría del Pueblo.
Respecto a la participación de las autoridades locales, informó que el alcalde de la Municipalidad Provincial de San Román, Oscar Cáceres, no reconoció retrasos en la reunión con representantes del BID, mientras que el alcalde distrital de San Miguel, Cristin Nicolás Mamani, sí manifestó preocupación debido a que su jurisdicción abarca tres zonas beneficiarias.
Ante esta situación los dirigentes evalúan medidas si nuevamente no se cumplen los plazos, recordando que el proyecto supera los 40 años de espera y que la población continúa consumiendo agua contaminada.