El estado de las instalaciones educativas representa un riesgo para los menores; padres y docentes piden medidas urgentes para mejorar las condiciones
Ayer, un grupo de docentes, padres de familia y estudiantes del Jardín de Niños N° 287, ubicado en Torres de San Carlos, Puno, alzó su voz para exigir la elaboración inmediata del expediente técnico que permita la construcción de una nueva y moderna infraestructura educativa. Esta demanda surge luego de que Defensa Civil alertara, desde 2013, que las actuales instalaciones representan un «riesgo muy alto» y recomienda su demolición.
La situación preocupa a cerca de 100 niños matriculados en el jardín, quienes diariamente realizan sus actividades en condiciones precarias y poco seguras. Ruth Toma, madre de familia, destacó que la infraestructura está en estado de abandono y que, debido a las últimas lluvias, se ha registrado filtración de agua por el techo. «Hacemos un llamado al alcalde de Puno, Javier Ponce Roque, para que muestre voluntad política y priorice este proyecto tan importante para nuestros niños», expresó.
Los padres de familia y docentes han reiterado que la situación es crítica y que, pese a las reiteradas advertencias, las autoridades no han tomado medidas efectivas para garantizar la seguridad y el derecho a una educación de calidad para los menores. Cabe indicar que los estudiantes desarrollan sus sesiones en aulas prefabricadas que tienen una antigüedad de más de 10 años.