“En los momentos de crisis en nuestra vida, no debemos quedarnos doliéndonos, tenemos que mirar hacia arriba, hacia Cristo, hacia el Señor”, dijo monseñor Jorge Pedro Carrión Pavlich.
En la homilía de la misa de la “Resurrección del Señor”, celebrada hoy 31 de marzo, en la Basílica Menor de la Catedral de Puno, monseñor Jorge Pedro Carrión Pavlich, obispo de la Diócesis San Carlos Borroneo de Puno, llamó a la ciudadanía a desprenderse del pasado, para mirar hacia adelante, mirar hacia arriba y mirar hacia el Señor.
Para explicar este enunciado, relató el encuentro de Cristo resucitado con María de Magdala y dijo; “María levanta la mirada, le dice maestro, luego se arroja a sus pies, abraza los pies de Jesús, y aquí hay algo interesante, en la traducción latina de San Jerónimo, Jesús le dice a María Magdalena no me toques. Y en la traducción original le dice no te aferres a mí, entonces debe desprenderse del pasado, debe desprenderse del concepto que tenía ella de Jesús, de su amigo, de aquel amigo que lo conoció en Galilea”.
Asimismo, dijo que esta experiencia vivida por María de Magdalena, todos nosotros la hemos vivido de alguna manera y en algún momento y compartió su experiencia luego participar de un funeral, manifestando que en un funeral siempre está presente esa idea, ese sentimiento, el por qué nos has abandonado, por qué nos dejas solos, y no somos capaces de levantar la mirada y ver otra perspectiva, de ver la otra realidad.
Continuó diciendo, “que por mucho que la muerte nos duela y eso sucede con las cosas ordinarias, tenemos que mirar hacia arriba, hacia Cristo, hacia el Señor y en los momentos de crisis de nuestra vida, no debemos quedarnos doliéndonos, sino; levantar la mirada hacia el Señor y él nos va a mostrar su rostro, un rostro de que nosotros vamos a obtener vida y vamos a saber quién es Jesús”.
Finalmente, monseñor Jorge Pedro Carrión Pavlich, recordó que; Jesús luego de resucitado envía a sus discípulos a Galilea, los manda a una región poblada mixta, porque había judíos fieles, pero mayoritariamente la población era pagana, eran griegos, eran de Siria, era gente inclusive hostil a la fe judía, Jesús ahí vivió y ahí enseñó.
Cuando Jesús les dice “vayan a Galilea que ahí me verán”, eso significa para nosotros, hoy en día el Señor nos invita a andar a la Galilea de nuestra vida, y en esa Galilea semipagana, porque en la vida de la familia que tenemos hoy en día, apenas rezamos, estamos influenciados por los medios de comunicación, que forjan nuestra vida según la propaganda que hoy recibimos, que no es cristiana, sino totalmente pagana y Jesús dice, ahí descúbranme, descúbranme en el hogar.
