El artista puneño, José Chura Apaza quien realizó las máscaras de la Diablada ubicados en la plaza de Armas de Puno, cuenta que a la edad de 10 años realizaba espectáculos de teatro
El artista puneño, José Chura Apaza, narró que el seudónimo “Jochas” nace durante su formación en la Escuela de Formación Artística de Puno, junto al profesor Jaime Flores, quien le motivó a crear su apelativo, para ser reconocido en el mundo artístico.
Recordó que, a su corta edad de 10 años realizaba espectáculos de teatro en varias localidades. Gracias al apoyo del padre Juan Valero y su participación en la Juventud Cristiana, tuvo la oportunidad de fortalecer sus habilidades en teatro, logrando ser parte del grupo teatral Yatiri, Tawa y de los primeros elencos de payasos.
Luego de ello, inició su afición por la elaboración de miniaturas y máscaras de personajes. A los 19 años de edad motivado por su esposa logró participar en la exposición de máscaras realizado en la plaza de Armas de la ciudad de Puno, donde conoció a Javier Quisbert Vila, uno de los artesanos más reconocidos de la región.
“Gracias a él, aprendí hacer máscaras para la festividad y actualmente vengo creando obras como las máscaras gigantes de la danza la Diablada, colocado en la plaza de Armas de la ciudad de Puno, que demoró un tiempo de 4 meses y medio para su elaboración”, expresó.
Cabe destacar, que José Chura Apaza, continúa realizando obras muy importantes como el mausoleo de los restos de Teodoro Valcárcel, que serán trasladados al cementerio Laykakota.