El mítico lago navegable más alto del mundo


“Yavarí”
Foto: “Yavarí”

En 1870, llegan a las legendarias aguas del lago Titicaca las piezas de las embarcaciones: “Yavarí” y “Yapura”.

Por:  José Calisaya

En nuestra añorada tierra de luz, pensamiento y libertad Puno; en 1870, llegan a las gélidas aguas del legendario Titicaca las piezas de las embarcaciones: “Yavarí” y “Yapura” de Peruvian Corporation ―empresa Inglesa de Trenes y Barcos, hecho que puso en apuros al Alcalde de entonces Dr. Manuel Arias (gestión 1871–1872) y otras autoridades de turno, que debieron terminar la construcción del puerto de Puno; consecuentemente, las actividades urbanas dan un giro hacia el Lago, como es la construcción del ferrocarril, iniciando sus operaciones en 1874, estando en la Alcaldía el Sr. Pedro García. En los sucesivos años, la ciudad se convierte en el centro y eje de actividades comerciales en torno al puerto lacustre. Al año siguiente (1875); según refiere Alfonso Torres Luna en su obra: Puno Histórico, la ciudad tiene una población de 7,919 habitantes, con una tendencia de crecimiento hacia la zona sur de la ciudad; además, que los barrios centrales muestran mayor interés en su orga¬nización: Barrio Victoria, Laykacota, Orkopata, el barrio Porteño empezaba a configurarse como el nuevo sector de crecimiento. Los Apus que custodian la ciudad: Azoguini, Macha¬llata, Cancharani, Ventilla, Huajsapata y la zona del barrio Mañazo vigilaban el crecimiento hacia el sector norte y oeste. A la usanza de las ciudades capitales de provincia, en Puno se instituye el Club de Tiro en el año 1913, además del velódromo para los ciclistas en la zona de la bahía de Puno, proyecto planteado por el alcalde Dr. Adrián Solorzano (gestión, 1900).


Como antecedente a la presencia de los vapores en el lago Titicaca, en 1861, los resultados del estudio refieren que si es posible la navegación en el lago Titicaca; esta seguridad hace que el gobierno de Ramón Castilla, tenga la mirada hacia Puno, además de mantener como prioridad principal, explotar los recursos naturales de la zona altiplánica, aprovechando los beneficios del auge de la industria del guano, se mandó a construir dos pequeñas cañoneras para el Lago Titicaca: Yavarí y Yapura. El Yavarí, fue bautizado en honor al inmenso afluente del Amazonas que sirve de frontera entre Brasil y Perú, fue una cañonera de la Armada peruana junto a su gemelo, el Yapura.

En octubre de 1862 llega al puerto de Arica vía el estrecho de Magallanes a bordo del vapor “Mayola”, la carga con las piezas de los vapores: “Yapura” y “Yavarí”, posteriormente en setiembre de 1863, es trasladado a Tacna vía ferrocarril; desde allí, son enviados a Puno en carga de mula, que atravesaba los andes, llevando un cargamento de 2766 piezas, que pesaban un total de 210 toneladas, la travesía se prolongó hasta 1870, y en marzo de 1872 se concluye el armado y votado al agua de los vapores: “Yapura” y “Yavarí”. Desde ese día, se escribe otro capítulo de la navegación en el lago Titicaca, con la presencia de las naves de hierro y mayor calado que se había conocido hasta entonces. La novedosa flota del Titicaca, mostraba al mundo el legendario y mítico lago como el “Lago navegable más alto del mundo”.

Muchos artículos coinciden que, el funcionamiento de los vapores: “Yapura” y “Yavarí” impulsaron el desarrollo comercial y económico para Puno; caso anecdótico refiere José de la Jara Alatrista, en su texto titulado: “Navegación en el lago”, que, para dar funcionalidad a los vapores, a falta de carbón mineral, se usaron excremento seco de llama, conocido en la zona como “taquia”, que reemplazaba al carbón mineral. Años más tarde se cambiaría sus maquinarias por diésel.

Las referencias bibliográficas concuerdan que, el vapor “Yavarí” fue construido por la empresa inglesa Ironworks and Shibuilding Company, en los astilleros Cammel Laird Brock Bhirkhenhes, de Inglaterra, es armado en los astilleros de Huajje (Puno), y botado al agua un 25 de diciembre 1872, siendo su primer capitán el Teniente 2do. A. P. Rómulo Espinar. En 1976 el vapor es transferido a ENAFER-PERU, luego a la Marina de Guerra del Perú, que lo rebautizó con el nombre de BAP CHUCUITO, lamentablemente sin mantenimiento alguno, quedando en desuso.

El 1987, por iniciativa de la dama inglesa Meriel Larken, se funda en Inglaterra la Asociación “Yavarí”, que adquiere la nave de la Marina de Guerra del Perú, siendo restaurada y remozada, se le devuelve su nombre original y se convierte en el primer naval museo del Perú, además de ser la nave de hierro más antigua del mundo que está operativo.