Invito a la feligresía a imitar la actitud del hijo pródigo, el arrepentimiento significa volver a la casa del padre Dios, dijo el obispo
El obispo de la Diócesis de Puno, monseñor Jorge Pedro Carrion Pavlish, recordó en la homilía de la misa dominical, celebrada este 18 de febrero, que con el primer domingo de la cuaresma se inicia la vida pública de Jesús. Explicó que, la cuaresma es un tiempo de preparación, “un tiempo para entender el misterio de la cruz y que la vida humana no termina en la muerte, sino que, es un paso a la vida”, indicó.
Invito a la feligresía a imitar la actitud del hijo pródigo, que regresa a la casa del padre, “todos sabemos que Dios nos ama y estamos invitados al arrepentimiento”, indicó.
Recordó que, en la homilía, Jesús nos muestra del gran amor que Dios tiene por nosotros; sin embargo, para mantener ese amor, es necesario arrepentirse. Explicó que, el arrepentimiento significa volver a la casa del padre Dios. Enfatizó que, por el bautismo, somos amados por Dios.
Finalmente, recordó que, la vida de Jesús no es un cuento de hadas, sino un relato que podría convertirse en nuestra propia vida. Monseñor Jorge Carrión invito a la feligresía a asumir el verdadero significado del bautismo, “somos amados por Dios y es ese amor que hoy nos sostiene, no lo olvidemos. Cuando dudamos de ese amor, estamos perdidos”, expresó.