España y Colombia se suman al rechazo a la investidura de Maduro


investidura de Maduro
investidura de Maduro

Ninguna de estas dos naciones enviará representación a la toma de posesión de Nicolás Maduro, en medio de controversias sobre las elecciones y la represión en Venezuela

La tensión política internacional sigue creciendo a medida que se acerca la toma de posesión de Nicolás Maduro el próximo 10 de enero. Tanto España como Colombia han anunciado que no enviarán representación alguna a la investidura presidencial del líder venezolano, en medio de denuncias sobre un proceso electoral fraudulento y violaciones a los derechos humanos.

Desde Madrid, un portavoz de la Cancillería española confirmó que el Gobierno de Pedro Sánchez no enviará ninguna delegación oficial al acto de juramentación. La postura de España se mantiene firme, sin reconocer los resultados de las elecciones que reeligieron a Maduro en julio pasado, y aunque no han validado a Edmundo González, el opositor que según la oposición habría ganado las elecciones, han pedido la publicación de los resultados de los comicios que respaldan la victoria del mandatario venezolano.

Por su parte, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, también expresó su decisión de no asistir a la investidura, citando la reciente detención de líderes opositores y defensores de los derechos humanos en Venezuela. Petro, quien ha estado en una posición delicada respecto a su política hacia el régimen de Maduro, reafirmó su compromiso con la no intervención en los asuntos internos de Venezuela, pero subrayó que no puede reconocer elecciones que no han sido libres ni transparentes. Además, destacó la situación de persecución política como un impedimento para asistir a la ceremonia.

Tensiones dentro del Gobierno colombiano

El pronunciamiento de Petro generó críticas dentro de Colombia, donde exmandatarios como Juan Manuel Santos e Iván Duque han cuestionado la postura del actual Gobierno frente al régimen de Maduro. Santos instó a Petro a seguir el ejemplo de Chile, que recientemente retiró su embajador de Caracas, mientras que Duque denunció lo que considera una “validación” de la dictadura de Maduro, acusando al Gobierno de Petro de ser cómplice al permitir la permanencia de su embajador en Caracas.

Petro, sin embargo, ha optado por no romper relaciones diplomáticas con Venezuela, aunque reconoció las serias preocupaciones sobre la falta de transparencia en el proceso electoral y el ambiente de represión.

Rechazo internacional y apoyo a la oposición

A lo largo de estos días, la presión internacional sobre Venezuela ha crecido. Mientras que países como España y Colombia se alejan del acto de investidura, algunos exmandatarios latinoamericanos, como Andrés Pastrana, han decidido acompañar al líder opositor Edmundo González en su regreso a Caracas, a pesar de las amenazas del Gobierno de Maduro.

El gesto busca visibilizar el rechazo al proceso electoral que muchos consideran fraudulento, y brindar apoyo a la causa de la oposición venezolana. González, quien ha sido reconocido por varios gobiernos como el legítimo presidente electo, planea regresar al país con el apoyo de personalidades internacionales para continuar su lucha contra la administración de Maduro.