El gobierno calificó la acción como una violación “descaradamente sin precedentes” de su soberanía; F-35 italianos respondieron al incidente en el marco de la misión de la Alianza en el Báltico.
El Gobierno de Estonia denunció que tres cazas rusos MIG-31 violaron este viernes su espacio aéreo al sobrevolar durante casi 12 minutos la isla de Vaindloo, en el golfo de Finlandia. Según el Ministerio de Defensa, las aeronaves ingresaron sin autorización, sin planes de vuelo, con los transpondedores apagados y sin comunicación con los servicios de tráfico aéreo. Ante ello, cazas F-35 de la Fuerza Aérea italiana, desplegados en la base estonia de Ämari como parte de la misión de la OTAN en el Báltico, respondieron al incidente.
El Ministerio de Exteriores de Estonia convocó al encargado de negocios de la Embajada de Rusia en Tallin y entregó una nota de protesta, calificando la acción como una violación inaceptable de su soberanía. El canciller Margus Tsahkna advirtió que este es el cuarto incidente de este tipo en lo que va del año, pero destacó que la incursión de tres aviones de combate constituye un hecho “descaradamente sin precedentes”.
La Unión Europea y la OTAN respaldaron a Estonia y consideraron el hecho una provocación más de Moscú en la región. El episodio ocurre apenas diez días después de que casi una veintena de drones rusos ingresaran al espacio aéreo de Polonia, lo que llevó a la Alianza Atlántica a derribar por primera vez aeronaves no tripuladas en territorio aliado, elevando la tensión militar en Europa del Este.