Alberto Quintanilla advierte que la rotación constante de funcionarios y el favoritismo político están desinstitucionalizando al Perú
El excongresista puneño Alberto Quintanilla advirtió que la constante rotación de funcionarios y la designación por favores políticos han contribuido a la desinstitucionalización del Estado peruano, afectando tanto la eficiencia de la administración pública como la lucha contra la corrupción.
Señaló que la alta rotación debilita la marcha de cualquier institución porque impide la especialización y la acumulación de experiencia. “El combate a la corrupción, sea en el ámbito público o privado, requiere mecanismos de control mutuo. Cuando estos se rompen, la corrupción avanza”, afirmó.
Recordó que más de seis expresidentes han enfrentado investigaciones o prisión, lo que evidencia el colapso de los mecanismos de control institucional. “Entre el 75% y 80% de funcionarios deberían acceder mediante concursos y meritocracia, mientras que entre el 20% y 25% podrían ser designados políticamente. Sin embargo, ningún funcionario debe estar fuera del alcance de la Contraloría u organismos de auditoría interna”, indicó.
Advirtió que instituciones como el Congreso concentran personal excesivo por intereses políticos. “Si se calculara un máximo de cuatro o cinco trabajadores por congresista, debería haber entre 420 y 650 empleados, no cuatro mil o más”, cuestionó.
“Sí es posible construir un país mejor, siempre y cuando haya control ciudadano y equilibrio de poderes. La vigilancia de la ciudadanía debe ser permanente”, finalizó.