El hombre, de 47 años, habría fallecido sin recibir atención médica pese a las súplicas de su esposa. El hecho ha causado indignación en Zepita
Un hecho lamentable viene conmocionando a la población del distrito de Zepita, luego de que Policarpio Barreto Chaparro, de 47 años, falleciera presuntamente por falta de atención médica oportuna, pese a haber sido operado días antes.
Su esposa, Lucy Sara Mamánica Paquira, entre lágrimas relató que su esposo había sido intervenido quirúrgicamente el jueves 30 de octubre, tras sufrir una caída desde un techo que le ocasionó una hemorragia interna, por lo que tuvo que ser operado de inmediato. Salió airoso de la operación, pero el domingo 2 de noviembre, alrededor de las tres de la tarde, el paciente comenzó a quejarse de fuertes dolores estomacales y dificultades para respirar. Inmediatamente acudieron al hospital de Yunguyo, pero no había ningún médico de turno, y las enfermeras solo atinaron a decirle que debía caminar.
“No había doctor, solo dos señoritas estaban correteando. Les dije que estaba mal, que le dolía, y me respondieron que tenía que caminar. No me quisieron ayudar. Cuando bajé a buscar al doctor, me dijeron que yo no era enfermera y que no podía reclamar”, relató entre lágrimas.
Sostuvo, además, que pese a los llamados de auxilio dentro del hospital, no se le colocó ni siquiera oxígeno, mucho menos se le brindó atención inmediata, por lo que, tras varios minutos, el personal le comunicó que su esposo había fallecido.
El cuerpo de Barreto fue trasladado a la morgue del hospital, mientras agentes de la Policía Nacional del Perú se hicieron presentes para realizar las diligencias correspondientes y recoger testimonios de la familia.
“Si lo hubieran atendido rápido, si le hubieran puesto oxígeno, tal vez estaría vivo. No es justo que no haya doctores cuando uno los necesita”, expresó la esposa.
Cabe indicar que el fallecido deja en la orfandad a cuatro hijos menores de edad, de 15, 13, 9 y 3 años, quienes dependían económicamente de él.