Premier Ernesto Álvarez anuncia medidas extraordinarias para recuperar el control de los penales, tras revelarse audios que implicarían al jefe del INPE en presuntos actos de corrupción.
El presidente del Consejo de Ministros, Ernesto Álvarez, informó que el Ejecutivo evalúa declarar en emergencia el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) ante la grave pérdida de control en los penales del país. Según explicó, líderes de organizaciones criminales continúan dirigiendo extorsiones, asesinatos y otros delitos desde prisión. En recientes operativos se descubrieron antenas clandestinas que permitían a los internos acceder a Internet y mantener comunicación con sus cómplices en libertad.
Álvarez señaló que la declaratoria de emergencia permitiría aplicar medidas extraordinarias para recuperar la autoridad dentro de los establecimientos penitenciarios. Entre las acciones que se estudian destacan el aislamiento y la redistribución de reclusos de alta peligrosidad hacia penales con mayor seguridad, como los de Lurigancho y Ancón. El objetivo principal, precisó, es cortar los canales de comunicación que facilitan el accionar de las mafias carcelarias.
El anuncio se produjo poco antes de la difusión de audios en los que una voz, atribuida al jefe del INPE, Iván Paredes Yataco, coordinaría el presunto cobro de S/80 000 para liberar a un expolicía condenado. Paredes negó las acusaciones y aseguró que tomará acciones legales contra quienes difundieron el reportaje. Ante ello, el premier indicó que el Ministerio de Justicia ya investiga el caso y que la permanencia del funcionario será definida en las próximas horas, basándose en las pruebas disponibles.
