Ignacio Apaza Pacori, vecino de la primera cuadra de la avenida Independencia de la salida al Cusco de Juliaca, cuestionó el servicio que brinda la Empresa Prestadora de Servicios de Saneamiento Seda Juliaca debido al color “chocolate” del agua.
Mencionó que esto se debería a las tuberías de fierro fundido colocados en diversas zonas del centro de la ciudad, que hasta la actualidad no han sido cambiadas.
Señaló que con el paso del tiempo quedan residuos de metal en los ductos, haciendo necesaria una limpieza constante con vertido de agua desde los hidrantes ubicados en distintas intersecciones.
Cabe indicar que estas declaraciones las expresó tras recibir abundante agua en cilindros, todos ellos de color café, inservibles para consumo humano.