Jurista puneño responsabiliza a comisión especial por designación de Gino Ríos en la JNJ


Jurista puneño
Jurista puneño

Fredy Ramos cuestiona a la comisión liderada por el defensor del pueblo por designar a un magistrado con antecedentes por violencia familiar

El exdecano del Colegio de Abogados de Puno, Fredy Ramos, afirmó que no se puede considerar que Gino Ríos, presidente de la Junta Nacional de Justicia, esté deslegitimado para ejercer su cargo, ya que los cuestionamientos en su contra tienen un carácter político, al igual que ocurre con otros titulares de organismos públicos.

Detalló que a Gino Ríos se le cuestiona por una sentencia de violencia familiar del año 2011. En ese entonces, las sanciones por estos casos eran de carácter civil. Ante ello, el señor Gino Ríos fue sentenciado en el ámbito civil, ya que recién desde 2015 la violencia familiar empezó a penalizarse formalmente, con sanciones de carácter penal.

Asimismo, señaló que toda persona tiene derecho a la rehabilitación y no debe estar perseguida de por vida por una sanción, ni impedida para ocupar un cargo. En otro momento, el jurista Ramos enfatizó que actualmente las normas son más estrictas en casos de violencia familiar, prohibiendo a quienes estén implicados ocupar cargos de dirección, conforme lo establecen las leyes. Sin embargo, antes no eran tan rigurosas las normas en nuestro país.

Precisó que, por razones morales e institucionales, Gino Ríos debió apartarse para no afectar la imagen de la Junta Nacional de Justicia (JNJ). Sin embargo, la responsabilidad principal recae en la comisión especial que eligió a los magistrados de la JNJ, compuesta por autoridades como el defensor del pueblo, el presidente del Tribunal Constitucional y el de la Corte Suprema, quienes debieron ser más rigurosos en su selección. Por lo tanto, el cuestionamiento debe dirigirse a esta comisión más que a la propia JNJ.

Finalmente, el exdecano del Colegio de Abogados de Puno criticó al defensor del pueblo, Josué Gutiérrez, por su visita a la región, calificándola como una provocación hacia una población que ha sido rechazada y maltratada por las autoridades actuales.