La presidenta del Tribunal Constitucional señaló que la ley que limita la penalización de crímenes de lesa humanidad a hechos posteriores a 2002 es válida y debe ser aplicada por los jueces según lo estipulado.
Luz Pacheco, presidenta del Tribunal Constitucional (TC), defendió la constitucionalidad de la Ley 32107, que establece que los delitos de lesa humanidad solo pueden ser penalizados por hechos ocurridos después de 2002, año en que Perú adoptó el Estatuto de Roma. La ley fue respaldada por el TC al declarar infundadas las demandas de inconstitucionalidad presentadas por el Colegio de Abogados de Lima y el Ministerio Público. Pacheco aseguró que, según el Código Procesal Constitucional (CPC), la ley es válida tal como fue redactada y promulgada, ya que no se alcanzaron los votos suficientes para modificarla.
La presidenta del TC aclaró que la ley no promueve la impunidad ni la prescripción de los delitos de lesa humanidad, sino que establece que dichos crímenes son imprescriptibles desde 2002, año en que el Estado peruano asumió compromisos internacionales. Además, señaló que antes de esa fecha, los delitos se rigen por el Código Penal, que tiene plazos de prescripción de entre 20 y 45 años, dependiendo del caso. Pacheco también expresó que algunos jueces no pueden inaplicar la ley, ya que su constitucionalidad ha sido confirmada por el TC, y advirtió que no seguir las decisiones del tribunal pone en riesgo la seguridad jurídica y el estado de derecho en el país.
La magistrada también señaló que, hasta el momento, el delito de lesa humanidad no está debidamente tipificado en el ordenamiento penal peruano, ya que aún falta precisar los elementos contextuales para identificarlo correctamente. En su intervención, Pacheco destacó que, en el Perú, el terrorismo de los años 80 y 90 no fue un crimen cometido por el Estado, sino una respuesta a las agresiones terroristas. En este sentido, indicó que el Estado peruano actuó para defender a los civiles, a diferencia de los crímenes de lesa humanidad cometidos por regímenes como el nazi, donde el aparato estatal estaba directamente involucrado en la persecución y exterminio de grupos étnicos.