El alcalde de la Municipalidad Provincial de Puno, Martin Ticona Maquera, opinó que las nuevas medidas emitidas por el Ejecutivo para contener la propagación de la enfermedad del coronavirus, permite a su vez flexibilizar el desarrollo de las actividades económicas de los rubros permitidos.
Mencionó que el pedido que realizaron para la modificación del nivel de alerta “extrema” a “muy alto” fue planteado por el descenso de casos de fallecidos a causa de la COVID-19, sin embargo, reconoció que no hay camas disponibles en la unidad de cuidados intensivos (UCI) en el hospital de Puno y el nivel socioeconómico de la población es de pobre y extremo pobre. “Estos dos últimos factores han impedido que se modifique el nivel de alerta”, dijo.
Cabe indicar que la inmovilización será de lunes a sábado que será de 9.00 p. m. a 4.00 a. m. del día siguiente; en tanto, los domingos (7 y 14 de marzo) rige el toque de queda estricto. Además, hubo cambios en la capacidad de aforo mínimos para algunas actividades económicas.
“A partir del lunes 1 de marzo se aplicará nuevas medidas, las mismas que permitirá a la población retomar sus actividades económicas, pero bajo estricto cumplimiento de las medidas de bioseguridad”, opinó el alcalde de Puno.
Mencionó que desde la municipalidad se fortalecerá la instalación de los mercados descentralizados, para que la población evite acudir a los mercados del centro de la ciudad de Puno. Para ello, se realizará labores de limpieza, mejoramiento de infraestructura de las plataformas, entre otros.
Por otro lado, cuestionó que algunas instituciones como Indecopi y Registros Públicos no estén trabajando ni siquiera de manera virtual, ya que varias acciones que pretende realizar la municipalidad se retrasan por la inoperatividad de los entes antes mencionados.
