Obispo de la Diócesis de Puno, monseñor Jorge Pedro Carrión Pavlich pidió que tomemos como ejemplo a San Carlos Borromeo por estar siempre al servicio de los demás
La Iglesia católica, cada 4 de noviembre celebra a San Carlos Borromeo, arzobispo de Milán y considerado santo patrono del Papa San Juan Pablo II. En ese marco el obispo de la Diócesis de Puno, monseñor Jorge Pedro Carrión Pavlich pidió que tomemos como ejemplo a San Carlos Borromeo por estar siempre al servicio de los demás y estar predispuesto a dar la vida por el prójimo.
“San Carlos Borromeo a los 15 años ejercía un poder dentro de la iglesia, buscaba entregarse siempre para servir a los demás, dedicando su tiempo en ayudar al prójimo y hoy lo recordamos como un ejemplo a seguir” explicó Monseñor.
Dijo que, la figura de Carlo Borromeo debe marcar un precedente en nuestras vidas, porque pese a que ocupó altos cargos eclesiásticos, jamás perdió la eficiencia y sobre todo la humildad. En ese marco, llamó a contribuir un futuro lleno de vida; más no de muerte y desesperación.
Cabe resaltar, que San Carlos Borromeo nació en Italia en 1538 en el seno de una familia noble. Su tío fue el Papa Pío IV, quien lo mandó llamar de Milán a Roma para que lo asista en la administración de su pontificado. Borromeo fue nombrado arzobispo de Milán y posteriormente cardenal. Participó en la organización y desarrollo del Concilio de Trento.