En una ceremonia especial desarrollada en el atrio de la Catedral de Puno, el obispo de la Diócesis San Carlos Borromeo de Puno, monseñor Jorge Pedro Carrión Pavlich, celebró una misa en honor a Santa Rosa de Lima. Participaron autoridades de la Policía Nacional del Perú, representantes del Gobierno Regional de Puno, la municipalidad y feligreses.
Monseñor recordaba los años del virreinato del Perú, entre los años 1586 – 1617, cuando una mujer indígena al servicio de la familia, la india Mariana, llamó por primera vez Rosa a Isabel Flores de Oliva. “Rosa descansaba en su cuna, Mariana se acerca; al contemplarla, observa el rostro sonrojado, hermosa y sonriente de la recién nacida. Entonces le dio por exclamar ‘hay que linda es esta niña parece una rosa´” dijo.
Recuerda a Rosa una mujer muy solidaria y empática “Rosa cobijaba a los más desvalidos de su tiempo- después de tanta pugna, consigue instalar en casa de sus padres un lugar donde atender a los enfermos. No hace diferencia entre blanco e indio, mestizo y negro. Para ella todos son sus hermanos a quienes atiende con caridad infinita y cariño excepcional” dijo el obispo.
Reiteró que Rosa, en su vocación de servir al prójimo, consideraba a todos como hermanos. A todos atendía con el mismo cariño. Por ello, reflexiona que hoy en día necesitamos el ejemplo de Rosa. “Estamos viviendo una crisis social, en la que estamos proyectando estructuras sociales creados por nosotros, en las que no hay el amor al prójimo” señaló.
