Asimismo, pidió a la Policía Nacional curar a la sociedad del flagelo de la corrupción
Tras dos años de restricciones por la pandemia del coronavirus, hoy 30 se agosto se celebró la Solemnidad de Santa Rosa de Lima, patrona de América y Filipinas y en el Perú de la Policía Nacional. La celebración eucarística estuvo presidida por el obispo de la Diócesis de Puno, monseñor Jorge Pedro Carrión Pavlich, en la Basílica Menor de la Catedral.
En su homilía, subrayó la labor que cumplieron los médicos y las enfermeras en tiempo de pandemia, de angustia y desesperación, “muchas veces no lo entienden, pero han brindado un servicio de caridad, aun exponiéndose a los contagios de la Covid; al igual que Santa Rosa de Lima dedicó su vida a los enfermos, a los marginados del mundo (mendigos e indígenas) también se hizo en tiempo de pandemia con el prójimo”, explicó.
“Así como hoy nos hemos reunido para dar gracias a Rosa de Lima, también debemos dar gracias a Dios por aquellas personas que se han entregado a los hombres y mujeres que hoy han concluido su vida a causa de la pandemia”, indicó. La autoridad eclesial, condenó que, en tiempos de pandemia muchos hayan negociado con la salud de las personas, con el único fin de enriquecerse, “como iglesia hemos recibido muchos ataques, pero también hemos canalizado la compra de plantas de oxígeno para calmar el dolor de los humanos”, indicó.
Monseñor Jorge Carrión, recordó que son muchas las enseñanzas que nos deja Santa Rosa de Lima, el saber escuchar la palabra de Dios y frecuentar en los Santos Sacramentos. A quienes hoy integran la institución de la Policía Nacional, pidió ser más sensibles ante el sufrimiento humano, “tienen que tener la capacidad de desprenderse de sí mismos para curar a los demás, no físicamente o del cuerpo, sino saber curar la sociedad, que hoy están siendo abatidos por los actos de corrupción, en los diferentes niveles”, expresó el obispo de Puno.
Replicó que la Policía Nacional hoy en día juega un papel importante, el de saber curar a la sociedad y para ello quienes integran la institución deben estar convencidos de su fe, “aprendamos de Rosa de Lima, sigamos su camino y a medida que la población descubra la transparencia de la Policía Nacional por curar las enfermedades sociales, serán más apreciados y respetados. Hagan méritos a su lema: Dios, Patria y Ley”, expresó la autoridad de la iglesia en Puno.
Finalmente, pidió por la Policía Nacional que necesita de la protección y bendición de Dios, para que tengan el coraje de anunciar a Cristo y actuar con mayor transparencia, “no es fácil ser policía y que las familias comprendan el ministerio que tiene cada uno de ustedes (policías). Pidamos por los miembros de la policía que en el ejercicio de su servicio han perdido la vida, cumplan su servicio hasta que Dios lo permita o llegue la hora de Dios”, sentenció el obispo de Puno en la homilía de la Solemnidad de Santa Rosa de Lima.
