En el calendario litúrgico hoy los pobladores de Taraco recuerdan la Fiesta de Pentecostés. Los pobladores suben al cerro Imarrucos donde se ubica una capilla. En los alrededores por tradición prenden velas. Sin embargo, hoy no fue la excepción y pese al estado de emergencia más de 300 personas se les observó faltando las normas dispuestas por el Gobierno central.
Desde la cima del apu Imarrucos, ubicado a 4080 metros sobre el nivel del mar, se observaba a la multitud, algunos niños, personas que danzaban al ritmo de los “Puli-Pulis” y un mínimo número de comerciantes; al resguardo de la emergencia solo cuatro efectivos de la policía.
En un primer momento, algunos pobladores se les observaba sin barbijos, no respetaban la distancia. Pero con la presencia de la policía estos intentaban cumplir las medidas de seguridad ante la emergencia.
“El Señor de Imarrucos no ha subido” se le escuchó decir a un poblador. En tanto, la capilla del lugar se encontraba cerrada y un comunicado informaba “cerrado por coronavirus”. Ramiro Arapa, vecino reconocido dijo que este tipo de costumbres invita a que la población suba al cerro, pero manteniendo las distancias y otras medidas de seguridad.
