Posible disolución de equipos especiales genera alarma por riesgo en investigaciones de corrupción


disolución de equipos especiales genera alarma
disolución de equipos especiales genera alarma

Abogado advierte retrasos, pérdida de información y debilitamiento institucional si se ejecuta la medida

El fiscal de la Nación interino, Tomás Aladino Gálvez Villegas, anunció la posible desactivación de los equipos especiales Lava Jato, Cuellos Blancos y EFICCOP, responsables de investigar algunos de los casos de corrupción más relevantes del país. La disposición ha generado preocupación debido a que estas investigaciones aún no concluyen y requieren de alta especialización.

En comunicación con Radio Onda Azul, el abogado Cristian Palomino explicó que la medida deja incertidumbre sobre quién asumirá los procesos aún vigentes. “No cualquier fiscal está preparado para defender o llevar a cargo determinados casos, y por eso se designó a grupos especializados. Si estos equipos se desactivan, se pierde la metodología y el nivel de preparación que requieren investigaciones de corrupción de alto nivel”, advirtió.

Recordó que el caso Lava Jato (vinculado a la constructora Odebrecht) y la red criminal conocida como “Cuellos Blancos del Puerto” exigen conocimientos avanzados sobre crimen organizado, lavado de activos, estructuras de poder y mecanismos de corrupción estatal.

También alertó que esta decisión se da en medio de una evidente crisis institucional. “En el último año, el Ministerio Público ha tenido cinco fiscales de la Nación, entre ellos Juan Carlos Villena, Patricia Benavides, Delia Espinosa y ahora Tomás Gálvez”, dijo, y agregó que una institución sin estabilidad difícilmente podrá garantizar investigaciones sólidas y transparentes.

Asimismo, mencionó que, de ejecutarse la medida, los casos pasarían nuevamente a fiscalías comunes o a unidades de corrupción de funcionarios o crimen organizado, pero sin la especialización que caracterizó a estos equipos. “Son casos aún en curso. Si los equipos desaparecen, se corre el riesgo de retrasos, pérdida de información y debilitamiento de las investigaciones”, finalizó.