Psicóloga alerta que la onicofagia infantil es una señal silenciosa de estrés en los más pequeños


El estrés en niños pequeños
El estrés en niños pequeños

Bertha Huallpa advierte que morderse las uñas no es un mal hábito, sino una manifestación de ansiedad en niños pequeños, y llama a los padres a brindar acompañamiento emocional genuino.

En una reciente edición del espacio psicológico de Radio Onda Azul, la psicóloga Bertha Huallpa alertó sobre un fenómeno cada vez más recurrente, el estrés en niños pequeños y sus formas silenciosas de manifestarse, como la onicofagia, es decir, el hábito de comerse las uñas.

Detalló que, aunque parezca increíble, niños desde los dos años pueden experimentar altos niveles de ansiedad o angustia. “No es solo berrinche, hay un trasfondo emocional que debemos entender”, señaló la especialista invitada, quien subrayó que la conducta de morderse las uñas no es un capricho ni un simple mal hábito, sino una señal clara de malestar psicológico.

Asimismo, precisó que los factores que podrían desencadenar este estrés infantil son diversos: ausencia emocional de los padres, cambios en su entorno familiar, conflictos dentro del hogar o la falta de atención afectiva de calidad. “Los niños pequeños no expresan su malestar con palabras, lo hacen con el cuerpo: no duermen bien, tienen pesadillas, lloran, gritan o se comen las uñas hasta sangrar”, añadió.

Además, advirtió que, muchas veces los adultos reaccionan de forma inadecuada, usando métodos punitivos como colocar ají, ajo o guantes en las manos del niño, sin atender la causa real del comportamiento. “El castigo solo empeora la situación. Lo correcto es observar, escuchar y acompañar emocionalmente”, afirmaron.

Finalmente, se llamó a los padres a brindar atención de calidad, no solo en cantidad de tiempo, sino en conexión emocional genuina. “Un niño equilibrado emocionalmente no solo requiere cuidados físicos, necesita sentirse amado, comprendido y acompañado”, concluyeron.