Preocupa el incremento de violencia familiar en Puno: aunque la mayoría de víctimas siguen siendo mujeres, los casos de varones agredidos aumentaron un 11%, revelando una problemática aún invisibilizada
El panorama de la violencia familiar en la región de Puno continúa siendo preocupante. Según datos del Centro de Emergencia Mujer (CEM), en lo que va del año se han reportado 1,581 casos de violencia física y psicológica, de los cuales el 89% corresponde a mujeres agredidas. Sin embargo, destaca un dato que genera alerta: los casos de varones víctimas de agresión han aumentado en un 11% en comparación con el año anterior.
Yuri Armando Mamani Hancco, coordinador regional del CEM, confirmó este incremento y señaló que, si bien las mujeres siguen siendo las principales afectadas por la violencia familiar, cada vez más hombres denuncian ser víctimas de agresiones, principalmente en el entorno conyugal.
“Los varones también son víctimas de violencia, aunque en una proporción menor. Este aumento del 11% refleja que hay una problemática silenciosa que requiere visibilidad y atención”, indicó Mamani.
De los 1,581 casos registrados en lo que va del año, aproximadamente 174 corresponderían a varones agredidos, mientras que más de 1,400 casos involucran a mujeres. La mayoría de estas agresiones se producen dentro del hogar, siendo las más comunes las de tipo psicológico, seguidas por las físicas.
El coordinador regional del CEM explicó que, la entidad brinda atención integral tanto a mujeres como a hombres que sufren violencia, aunque reconoció que aún existe un fuerte estigma social que impide que muchos varones denuncien sus casos.
“Los hombres a menudo sienten vergüenza o temor al ridículo, lo que dificulta la visibilización del problema. Nuestro mensaje es claro: toda víctima tiene derecho a ser escuchada y protegida, sin importar su género”, agregó.