En la misa dominical, el Obispo de la Diócesis de Puno, Monseñor Jorge Pedro Carrión Pavlich, dijo que debemos valorar el sacramento del bautismo, porque es el regalo más grande que nos ha dado dios a cada uno de nosotros, además de ser el sentido de la vida cristiana, ya que dios es un dios de vivos y no de muertos.
Señaló, que aprender a valorar el bautismo nos abre a la vida eterna y al encuentro definitivo con dios, por eso como cristianos debemos festejar el bautismo como se festeja los cumpleaños.
Asimismo, llamó a la reflexión, indicando que el sacramento del bautismo no debe depender de un padrino o de la búsqueda de oportunidades sociales, porque el bautismo es para convertirnos en hijos de dios y recibir la herencia a la eternidad.
Preciso, que cuando nos sumergimos en el agua bautismal, nos sumergimos en la muerte, para luego recibir la vida y esa vida no caduca, no tiene fin, porque desde ese momento se inicia una vida junto a dios.
Finalmente, refirió que al morir Jesús en la cruz, dona vida para la humanidad y habré esperanza para el futuro, por eso su resurrección es el triunfo sobre la muerte, un triunfo que todo cristiano debe esperar, porque el cristiano que tiene fe, no vive para morir si no para vivir.
