Alain Mendizábal Gutiérrez, alcalde de la Municipalidad Distrital de Orurillo, manifestó que el desborde de los ríos Nuñoa y Corahuiña, que pasan por los centros poblados de Ajllamayo, Choquesani y Balsapata, esta última del distrito Orurillo generó la inundación de varias viviendas, más de 80 viviendas colapsadas, 2 mil 500 hectáreas de cultivos perdidos y carreteras incomunicadas.
Asimismo cuatro instituciones educativas corren el riesgo de colapsar, poniendo en riesgo que el inicio de las labores escolares se retrase en esta localidad, dónde las autoridades educativas ya deben de accionar.
Explicó que como plataforma de Defensa Civil ya intervinieron con maquinarias y un presupuesto que supera los 100 mil soles, para la rehabilitación de carreteras, aperturando zanjas, entre otros.
Aseguró que es urgente la intervención del gobierno provincial, el Gobierno Regional de Puno e incluso el gobierno nacional, con este fin ya habrían remitido el padrón de damnificados.