El supervisor de la obra, Lucar Cabanillas Toro, dijo que, según el cronograma contractual la obra debió terminar el 5 de febrero del próximo año; sin embargo, por los retrasos, ha sido ampliado hasta el 16 de junio del 2023, “es decir que la contratista a partir de la fecha tiene 11 meses para concluir los trabajos”. Explicó que, lo avanzado hasta la fecha, con la culminación de la etapa estructural, el proyecto en ejecución tiene un avance del 27%, “a partir de la fecha la contratista deberá redoblar los esfuerzos para valorizar la obra, que por mes debería ser el 7% de avance”, indicó.
Explicó que la obra tiene cinco meses de retraso por las acciones de protesta de la población, desde fines del pasado año y los primeros meses de este 2023, y 3 meses de retraso por la voladura de rocas al inicio de los trabajos, “la obra debió tener un 50% de avance, pero estas han sido las principales limitaciones que han dificultado el avance”, indicó el supervisor.
Recordó que, el costo del proyecto en ejecución no ha sufrido modificaciones en el tema presupuestal, “no hubo ningún aumento, a excepción del 1% y eso es lo más importante, el costo se mantiene en los 275 millones de soles”, indicó Lucar Cabanillas.
Respecto al abastecimiento de materiales, dijo que, está garantizado, “hay presupuesto y la contratista debe acelerar los trabajos para valorizarlos”, indicó. Sobre el pago a los trabajadores, dijo que, la deuda es de tres semanas con el lunes de la siguiente semana, pero aclaró que, también está garantizado.