La mañana de ayer se movilizaron un grupo de profesionales del centro de salud Metropolitano de Puno exigiendo a las autoridades del gobierno regional, el respeto de sus espacios donde venían atendiendo a pacientes Covid-19. Las manifestantes adujeron que concluyó la vigencia del convenio suscrito con la Institución Educativa Inicial Nro.236, que funciona en parte de sus instalaciones.
Ante esta situación, decidieron suspender la atención a pacientes Covid-19, “nos han reducido los espacios y así no se puede trabajar. En estas condiciones no podemos brindar una atención de calidad a los pacientes”, expresó una de las protestantes.
Asimismo, cuestionaron el poco interés de los padres de familia de la cuna jardín, que poco o nada hicieron para abandonar sus instalaciones, a pesar de haberse conocido que la vigencia del convenio feneció en diciembre del pasado año, “ellos tienen su local en Salcedo y pedimos que se vayan”, indicaron.
Manifestaron que, por día se realizaban muestras a más de 50 pacientes con síntomas del Covid-19 y que hoy ya no podrán realizar. Asimismo, afirmaron que, al costado de la institución educativa existen módulos donde actualmente se realizan pruebas a pacientes con tuberculosis, “son los padres de familia que exponen a la salud de sus hijos. Pedimos un pronunciamiento del gerente regional de Desarrollo Social”, indicaron.
