Pablo Mollocondo asegura que fue despedido injustamente por consumir coca, costumbre local
Pablo Mollocondo, trabajador de construcción civil de la obra del Colegio “Glorioso 821” de la ciudad de Macusani, provincia de Carabaya, denunció haber sido despedido de manera arbitraria mientras laboraba en dicho proyecto. Según su testimonio, el despido se habría dado bajo el argumento de que estaba bajo los efectos de un estupefaciente, sin embargo, ratificó que este señalamiento era completamente falso.
Explicó que, como cada mañana, ingresó a trabajar a las 6:00 a. m. sin inconvenientes. Sin embargo, alrededor de las 9:10 a. m., mientras realizaba labores de desencofrado, un representante de la empresa a cargo de la obra se le acercó y le exigió que presentara al día siguiente sus documentos de C4 y DNI, pero el trabajador le señaló que se encontraba en trámite, debido a que días atrás, en la entrega de su equipo de protección personal (EPP), la responsable habría extraviado su documento y que esta situación era de conocimiento de la empresa.
Pero cuando se encontraba explicando esta situación, el ingeniero identificado como Miguel Quebedo lo acusó de estar bajo los efectos de sustancias indebidas debido a que tenía hojas de coca en la boca, lo que el trabajador negó rotundamente, afirmando que el consumo de coca es una costumbre arraigada en la zona, utilizada para combatir el frío y aliviar dolores estomacales.
«Nosotros entramos a trabajar desde muy temprano, muchas veces sin desayunar, y la coca nos ayuda con el malestar estomacal. Es parte de nuestros usos y costumbres», declaró el obrero, al tiempo de afirmar que otros compañeros también consumen coca, pero solo a él se le impuso la sanción inmediata sin previo aviso ni posibilidad de defensa.
Ante este hecho, el trabajador exige una explicación y reconsideración por parte de la empresa, mientras que el caso ha generado indignación entre sus compañeros, quienes afirman que se trata de una vulneración a sus derechos laborales y culturales.
