Más de 3 mil empleados del programa Qali Warma exigen justicia y aclaran su compromiso con la salud de los niños ante los recientes escándalos
Más de 3 mil trabajadores del programa Qali Warma en todo el país alzaron su voz de protesta en rechazo a las recientes acusaciones de corrupción que han afectado la imagen del programa. Empleados de la ciudad de Puno, liderados por Herber Gutiérrez, secretario del sindicato de trabajadores de Puno, se manifestaron para aclarar que ellos no están involucrados en los actos de corrupción que se han reportado en los últimos días.
Gutiérrez destacó que, como trabajadores, están comprometidos con la salud y el bienestar de los niños y han cumplido con su labor de manera transparente y eficiente. “Nosotros no tenemos nada que ver con los actos de corrupción en el programa. Hemos trabajado con responsabilidad y dedicación, y no es justo que se nos involucre en estas situaciones”, señaló.
Pidió que se investiguen a fondo los casos de corrupción y que los responsables sean sancionados. Resaltó que la imagen del programa y la salud de los niños a nivel nacional están siendo dañadas por estos incidentes.
Aclaró que, de los 3 mil trabajadores que forman parte del programa a nivel nacional, solo se han identificado 19 casos de corrupción, lo que no representa a la mayoría. “Este número no refleja la realidad del trabajo que realizan miles de personas a diario. Exigimos que se castigue a los responsables, pero no que se nos haga responsables a todos”, agregó.
Subrayó que su labor ha sido siempre transparente y responsable, y que los medios de comunicación del nivel nacional, al tratar de vincularlos con los escándalos de corrupción, no están reflejando la verdad de su trabajo en el programa.
