Mientras Boluarte y Santiváñez insisten en romper con la Corte Interamericana, varios ministros como Ángel Manero se oponen públicamente
La propuesta del Ejecutivo de romper relaciones con la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) ha generado una visible división al interior del gabinete de Dina Boluarte. El ministro de Desarrollo Agrario, Ángel Manero, confirmó que existe desacuerdo entre los ministros respecto a esta medida.
“Hay ministros que están a favor y otros que estamos en contra. Yo considero que no es conveniente salir de la Corte”, declaró Manero ante la prensa.
Estas declaraciones se dan tras el regreso de Juan Santiváñez al Ministerio de Justicia, quien ha sido señalado como uno de los principales promotores de la ruptura con la Corte, a raíz de sus cuestionamientos por la Ley de Amnistía, ampliamente criticada por organismos internacionales por favorecer a violadores de derechos humanos.
Aunque el ministro de Transportes, César Sandoval, evitó pronunciarse de forma clara, el titular de Energía y Minas, Jorge Montero, apoyó abiertamente la salida de la Corte IDH:
“Es un avance. Debemos tener libertad para actuar sin imposiciones externas”, señaló.
Boluarte, por su parte, insiste en que la Corte actúa como si el Perú fuese «una colonia», y ha afirmado que no permitirá injerencias internacionales.
Esta fractura expone la falta de consenso en el Ejecutivo y suma incertidumbre a un escenario político ya tensionado por la crisis de legitimidad del gobierno.
