Ucrania detiene el tránsito de gas ruso tras la expiración del acuerdo de cinco años, un cambio histórico que sacude los cimientos del mercado energético europeo
En un movimiento que amenaza con agitar aún más el panorama energético europeo, Ucrania ha anunciado la suspensión del tránsito de gas ruso a través de su territorio, poniendo fin al acuerdo de cinco años firmado en 2020. Esta decisión, tomada por el Ministerio de Energía de Ucrania, responde a «intereses de seguridad nacional» y se produce en un momento crítico, justo cuando la guerra en Ucrania entra en su cuarto año.
El cierre de uno de los principales gasoductos entre Rusia y la Unión Europea estaba anticipado, pero su impacto se siente de inmediato: a partir de este miércoles, la única ruta restante para que Gazprom, el gigante energético ruso, envíe gas a Europa es a través del gasoducto TurkStream, que atraviesa Turquía y llega a Bulgaria.
Un Cambio Histórico
Este es un hito en la relación energética entre Rusia y Europa, especialmente considerando que, antes de la invasión rusa a Ucrania en 2022, las importaciones de gas de Rusia representaban más del 40% del consumo energético europeo. Sin embargo, en 2023 esa cifra ha caído drásticamente a solo el 8%, según datos del Consejo Europeo. Mientras la UE busca diversificar sus fuentes de energía, el cierre de esta ruta de gas agrava las tensiones, especialmente en un contexto de precios elevados y escasez de suministro.
Consecuencias para Ucrania y Gazprom
La interrupción del tránsito de gas traerá serias consecuencias económicas para ambas partes. Ucrania perderá aproximadamente 800 millones de dólares al año por concepto de tasas de tránsito, mientras que Gazprom sufrirá una pérdida estimada de 5,000 millones de dólares debido a la disminución de las exportaciones a Europa. Este panorama tensa aún más un mercado que ya se encontraba bajo presión.
A pesar de que algunos países de la UE, como Eslovaquia y Austria, habían asegurado rutas alternativas, el golpe al flujo energético está claro. Además, la caída de las exportaciones a Europa ha sido un factor clave en las pérdidas de Gazprom, que registró en 2024 la primera pérdida financiera en más de dos décadas.
Impacto Global y Futuro Energético
La pérdida de esta ruta de gas añade más incertidumbre a un mercado energético europeo que ya se encontraba enfrentando desafíos significativos debido a la guerra en Ucrania y las sanciones internacionales. A medida que el mercado europeo se adapta a la nueva realidad sin el gas ruso, la dependencia de fuentes alternativas de energía, como el gas natural licuado (GNL) y las energías renovables, se hace cada vez más evidente.