Desconocimiento y omisión de los derechos indígenas


Bartolina Sisa junto a su esposo Julián Apaza – Túpac Katari
Foto: Bartolina Sisa junto a su esposo Julián Apaza – Túpac Katari

Bartolina Sisa junto a su esposo Julián Apaza – Túpac Katari, fue guerrera aimara del Collao, dedicó su vida a luchar contra los opresores colonizadores, buscando la libertad.

En 1782 los españoles luego de apresar a Bartolina Sisa Vargas, la torturaron, ahorcaron y descuartizaron, exhibiendo la cabeza y extremidades en los distintos lugares donde ella luchó. Bartolina Sisa junto a su esposo Julián Apaza – Túpac Katari, fue guerrera aimara del Collao, dedicó su vida a luchar contra los opresores colonizadores, buscando la libertad y una vida digna para sus hermanos; con este motivo, el 5 de septiembre de cada año se conmemora el “Día Internacional de la Mujer Indígena, con el propósito de reivindicar los derechos individuales y colectivos de las mujeres indígenas.

Han trascurrido 241 años y la discriminación, la desigualdad sigue vigente, según el Informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) emitido el 17 de abril del 2017, las vulneraciones a los derechos de las mujeres indígenas en las Américas Latina se presentan en la:

  • 1ro. VIOLENCIA BASADO EN GENERO.- Violencia física, psicológica y sexual; en la militarización de las tierras indígenas. Feminicidios y desapariciones de las líderes y defensoras de los derechos humanos.
  • 2do. ACCESO A LA JUSTICIA.- Se tiene escasa asignación de intérpretes de lenguas originarias en los espacios de justicia; por lo tanto, ellas enfrentan la insensibilidad étnica y cultural de los operadores de justicia. En los peritajes médicos forenses y jurídicos no se respetan las costumbres y tradiciones indígenas; enfrentan obstáculos dentro de su propio sistema de justicia debido a prácticas culturales basados en estereotipos de género.
  • 3ro. ACCESO A DERECHOS ECONÓMICOS, SOCIALES Y CULTURALES.- en las comunidades campesinas, existen aún dificultades geográficas y económicas para tener acceso a los servicios de salud y educación, es lamentable que no puedan acceden a servicios de salud debido a su lengua indígena, vestimenta o uso de medicina tradicional; por otro lado, en su mayoría no tienen accesos a prestaciones de seguridad social porque trabajan en el sector informal.

Al conmemorar el día Internacional de la mujer Indígena y abordar el delicado tema de los derechos de la mujer indígena, comprende también al varón, porque la vivencia ancestral, la psicología y sabiduría andina se rigen por los principios de dualidad, reciprocidad y complementariedad, entonces el varón y la mujer son el engranaje de un motor que dinamiza la actividad económica, social, cultural, etc.; por tanto, cuando se trata el tema desde una mirada fraccionada, el análisis no es integral. Hecho que me ha permitido observar estudios e informes exhaustivos, siendo el caso resaltante, cuando en el Perú se diera la Ley de consulta previa Ley N° 29785, en el año 2011, donde aparentemente el Perú ingresa a un proceso favorable en la protección de los derechos de los pueblos indígenas, después de los sucesos de Bagua en el año 2009. Sin embargo, la matriz energética y el modelo de generación de renta dependían de las actividades extractivas, como la minería y los hidrocarburos, afectando directamente sus territorios, superponiéndoles proyectos sin consulta, con limitados mecanismos de participación y generando impactos sociales y ambientales muy serios. El estado peruano autorizó a las empresas extranjeras para que viabilizar proyectos extractivos y de infraestructura, reduciendo estándares y capacidades de fiscalización ambiental; ello no solo ocurría en la selva peruana, sino a nivel nacional, con un impacto negativo a los derechos de los pueblos indígenas, un atentado a las actividades ganaderas y agrícolas en las zonas alto andinas del Perú, porque sus ríos se contaminaron, la tierra ya no produce por el desequilibrio ecológico generado por las actividades extractivas.  

Conmemorar el día de la Mujer Indígena, no sólo debe quedar reconocimientos, felicitaciones y reflexiones sin un compromiso de las autoridades, organizaciones y entidades comprendidas en la protección y valoración de la vivencia de los hombres de la zona rural; en este escenario, el Examen Periódico Universal – EPU, se presenta como una oportunidad para generar incidencia y proponer cambios para la mejora de la gestión de los derechos humanos y de los Pueblos Indígenas en el Perú.

El EPU es un mecanismo del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas para invocar a los países miembros a una revisión sobre el cumplimiento de los Derechos Humanos para generar recomendaciones y mejorar el respeto y la aplicación plena de estos derechos. Este mecanismo se fortalece por su carácter participativo, al incorporar información generada por organizaciones indígenas, instituciones y sociedad civil en general.

En Puno, es imprescindible manejar una política pública de gobernanza regional y de gobiernos locales – Municipalidades provinciales y distritales – para incorporar proyectos y programas prioritarios de valoración y promoción de la actividad rural en nuestra región Puno; además de viabilizar acciones de cooperación internacional con la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos del Perú y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas de los Derechos Humanos, para la implementación de los acuerdos del (Examen Periódico Universal) EPU 2017, respecto a las vulneraciones a los derechos de los pueblos indígenas en el Perú.

Recuerde que, el problema de la contaminación ambiental generado por la actividad extractiva de la minería y los hidrocarburos, no solo atañe a la zona rural, sino a la población en general. La diferencia, es que nuestros hermanos de la zona rural, tienen una relación armoniosa con la naturaleza y el cosmos por sus características de vivencia, y los efectos del desequilibrio ecológico los perciben directamente; hecho que muchos citadinos desconocemos.

Por: José Calisaya