En su reflexión, el párroco Luis Zambrano Rojas destacó que el verdadero amor implica señalar errores con afecto y buscar el bienestar de los demás, incluso en la sociedad y la política.
Con motivo del “Día de San Valentín”, el párroco de la parroquia Pueblo de Dios del distrito de San Miguel, Luís Zambrano Rojas, reflexionó que, para todos nosotros el amor es lo más bonito, pero es lo más difícil, no solamente el amor en pareja, sino también, en la familia, amistades y la relación con las personas con las que trabajamos.
Consideró que, en el presente año todos debemos meditar en lo siguiente: sepamos corregir con cariño a las personas que amamos, el no decir las cosas, el tapar sus errores, no es amor, porque cuando uno quiere a una persona si la ve que está cayendo al abismo, la detiene y si ya cayó la ayuda a salir de ahí.
Explicó que, cuando uno no dice nada y deja que todo siga mal, significa que realmente no hay amor, sino hay conveniencia, la situación actual en el país sería porque muchas de las personas no les dirían sus errores a los políticos que nos están gobernando, porque están aprovechando un puesto, una buena mirada y nada para el futuro.
Enfatizó que, el amor es sacrificado y tenemos que corregirnos mutuamente si es que realmente nos amamos, como nos lo recomienda siempre el apóstol Pablo. “Esta tradición se recoge, para decirnos que lo único que nos puede salvar como humanidad. es el amor sincero que nos tengamos entre nosotros”, dijo.
