En la misa del domingo, el obispo de Puno reflexionó sobre el rezo del Padre Nuestro


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Invitan a la feligresía a rezar el Padre Nuestro, no de memoria; sino desde lo más profundo de nuestros sentimientos

En la homilía de la misa dominical, el obispo de la Diócesis de Puno, monseñor Jorge Pedro Carrión Pavlich, invitó a la feligresía a rezar el Padre Nuestro, no de memoria; sino de profundos sentimientos, “aprendamos a saborear esta oración; así como el niño su caramelo, sólo así sabremos mas de Dios que aprender grandes libros”, expresó la autoridad eclesial en Puno.

Explicó que, orar el Padre Nuestro significa nadar y sumergirnos dentro de lo imposible. Recordó que, según San Agustín – la oración que Cristo nos enseñó contiene todo lo que el hombre puede pedir, “nos introduce en el ministerio de su ser y de su vida”, expresó el obispo de Puno.

Recordó que la oración de Jesús inicia con el tratamiento muy particular de un niño hacia su padre, que significa cariño y amor. Explicó que, el Padre Nuestro es la oración del cristiano, del bautizado y de todos los hijos de Dios.