Pedro Farfán Valencia, vicario de la parroquia Cristo Rey de Juliaca, señaló que, la fiesta de San Juan de Dios debe invitar a la feligresía a reflexionar sobre la caridad en el ser humano, principalmente por los enfermos, pobres y necesitados durante estos tiempos, pese a que no todos tienen la profesión de médico.
Expresó que, así era la actitud de San Juan de Dios, quien predisponía todo lo que tenía a favor de los enfermos y los desposeídos. Agregó que en su momento entregó su vivienda para cobijar a personas que padecían de algún mal, siendo rescatada esta actitud por parte de la población.
Añadió que, actualmente en la ciudad de Juliaca, la tradición de recordar a este santo se vive la urbanización Zarumilla, Taparachi y otros centros de salud, al considerarse que es el patrono de los hospitales, donde se realizan celebraciones litúrgicas y otras actividades.
Asimismo, indicó que no es necesario recibir una recompensa física, sino que realizar un acto de caridad, bendice al ser humano en sus actividades cotidianas.