La pandemia mundial del Covid-19 y las recientes protestas sociales contra el actual gobierno han dejado su huella en las tradiciones culturales de Juliaca. La Qashwa de San Sebastián, considerada Patrimonio Cultural de la Nación, ha sido una de las prácticas afectadas por estas circunstancias adversas.
Hipólito Machaca Benique, expresidente de la Agrupación de Tokoros y Pinquillos Los Machuaychas de Juliaca, lamenta que tanto la pandemia como las protestas hayan truncado la práctica y difusión de esta danza ancestral, que es parte importante de la identidad cultural de la región.
Ante esta situación, Machaca Benique espera que se puedan realizar más actividades para reactivar la práctica de la Qashwa de San Sebastián una vez que las condiciones sanitarias y sociales lo permitan.
Cabe indicar que, para dicho dirigente y otros miembros de la comunidad, es fundamental mantener viva esta tradición y seguir transmitiéndola a las generaciones futuras.
