La familia de Iglesia o el pueblo de Dios tiene una madre y es María. Ella es muy importante por ser instrumento del amor del Señor; pues representa la fortaleza y la esperanza para todos, reflexionó el excelentísimo cardenal, Pedro Barreto Jimeno, Arzobispo Metropolitano de Huancayo, primer vicepresidente de la Conferencia Episcopal Peruana, en entrevista en el programa Participación Ciudadana de radio Onda Azul.
Asimismo, mencionó que Jesús, en el momento más difícil de su propia vida nos entregó a su madre, por ello ocupa un lugar muy importante en la Iglesia. Ella es la primera cristiana y la mejor expresión de fidelidad a la voluntad de Dios.
Aquí en Puno, existe una profunda devoción a la Virgen María, pues ella siempre está atenta a las necesidades y pone a su hijo como único fin de nuestras vidas, puntualizó el Cardenal Pedro Barreto.
