El obispo de la Diócesis de Puno, monseñor Jorge Pedro Carrión Pavlich, manifestó que las parábolas evangélicas del tesoro escondido en el campo y de la perla preciosa, explicadas en la homilía de la misa dominical nos invita a colaborar y ayudar en la construcción del Reino de Dios.
El obispo preguntó: “¿Somos colaboradores en construir el Reino de Dios? ¿Somos partícipes para que este reino vaya tomando forma en nuestras vidas y en nuestra sociedad?”
Replicó que como creyentes y cristianos católicos estamos llamados a colaborar en la construcción del Reino de Dios. Aclaró que no basta repetir las oraciones que Jesús nos enseñó, “es correcto, pero también nos invita poner la mano en el arado y abrir el surco de la vida, para que discurra el agua de la vida y que lo sembrado pueda dar frutos”, expresó monseñor Carrión Pavlich.
