Mandatarios de toda la región saludan con emoción al nuevo Pontífice, destacando su compromiso con la justicia social, la paz y su profundo vínculo con el Perú y América Latina
La elección del Papa León XIV, anteriormente conocido como el Cardenal Robert Prevost, ha resonado con fuerza en América Latina. Líderes de distintos países expresaron su alegría y esperanza tras el nombramiento del nuevo Pontífice, resaltando su profundo vínculo con la región, especialmente con el Perú, donde ejerció su labor pastoral durante más de dos décadas.
Desde Lima, la presidenta Dina Boluarte celebró con entusiasmo lo que calificó como “un momento histórico” para el país: “El Papa es peruano. Dios ama el Perú”, dijo con orgullo, destacando que León XIV es “ciudadano peruano por elección y corazón”.
La presidenta mexicana Claudia Sheinbaum resaltó la “convergencia humanista” entre su gobierno y el pontífice, mientras que el mandatario colombiano Gustavo Petro dijo sentir “esperanza” y pidió que León XIV sea “el gran líder de los pueblos migrantes del mundo”.
En Brasil, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva expresó su deseo de que el nuevo Papa continúe el legado de Francisco, guiado por la justicia social, la paz y el respeto por la diversidad. “No necesitamos más odio, sino amor al prójimo”, escribió.
Desde Argentina, el presidente Javier Milei compartió una imagen provocadora generada por IA con un león papal, pero luego su gobierno emitió un comunicado oficial expresando “profunda esperanza” ante el liderazgo del nuevo Papa.
Otros mandatarios, como José Raúl Mulino (Panamá), Daniel Noboa (Ecuador), Santiago Peña (Paraguay), Miguel Díaz-Canel (Cuba), Gabriel Boric (Chile), Nayib Bukele (El Salvador) y Xiomara Castro (Honduras), coincidieron en señalar que el pontificado de León XIV puede convertirse en un faro de unidad, paz y justicia.
Especialmente significativo fue el reconocimiento de la presidenta hondureña, quien evocó la línea social de León XIII para vincular al nuevo Papa con una Iglesia cercana a los pobres y comprometida con el bien común.
El mensaje común de los líderes latinoamericanos es claro: el Papa León XIV, con raíces profundas en América Latina, representa una oportunidad única para que la Iglesia católica siga siendo un puente de esperanza, diálogo y transformación social en tiempos de gran incertidumbre global.
