Puneño crea un gran panel solar en laguna Chullpia para mejorar la vida de los pobladores


Fotografía: Rpp

En Chullpia está pasando algo único en el Perú. Chullpia es el nombre de la laguna situada a 4.000 metros de altura, en la región de Puno. Debido a su ubicación geográfica, donde el oxígeno es escaso y las temperaturas descienden por la noche, las familias que habitan en la región enfrentan un grave problema: viven sin electricidad.

Juan Sergio Castro Zuni, de 28 años, sabía que la laguna podría mejorar la vida de las familias locales, simplemente no sabía cómo. La respuesta le llegó después, cuando decidió inventar un método para extraer agua de la laguna y usarla para regar los pastizales cercanos. ¿Cómo? Con energía solar, una energía infinita y gratuita.

La gran hazaña de toda una comunidad

El joven puneño motivó a su comunidad para ayudarlo con un proyecto innovador que cambiaría sus vidas: construir un gran panel solar flotante. Pero el camino no fue fácil…

El equipo se enfrentó a muchas dificultades. Al principio, las condiciones climáticas dificultaban la construcción del panel.

Sin embargo, esto no los detuvo. Juan sabía que este invento no solo contribuiría a la reducción de los gases de efecto invernadero, sino que también mejoraría la calidad de vida de las comunidades vulnerables que no contaban con energía. Tras varios meses, lograrían construir el panel flotante en la laguna Chullpia.}

Sin embargo, esto no los detuvo. Juan sabía que este invento no solo contribuiría a la reducción de los gases de efecto invernadero, sino que también mejoraría la calidad de vida de las comunidades vulnerables que no contaban con energía. Tras varios meses, lograrían construir el panel flotante en la laguna Chullpia.

Se trata de 34 paneles que, unidos a una estructura de metal y caucho reciclado, recorren la laguna capturando los rayos solares. Los paneles solares le dan energía a un motor que llena once reservorios de agua construidos alrededor de Chullpia, que finalmente se utiliza para regar los pastos cercanos.

Esta práctica no solo garantiza un mejor suelo, el cual resulta ideal para pastar alpacas, llamas y vicuñas, sino que, además, los animales se alimentan mucho mejor, logrando una mayor productividad y generando mayores ingresos para las familias.

Gracias a la implementación de este sistema y a los conocimientos ancestrales que aún se conservan, los pastos se mantienen verdes incluso en la época seca, el suelo se enriquece, las alpacas crecen con fibra de mayor calidad y las personas viven mejor.

Su sueño es inspirar a otras comunidades para que encuentren alternativas a los obstáculos que enfrentan y trabajen para su propio desarrollo. Ese es el reto que debemos considerar, debemos trabajar para seguir revolucionando el mundo, en beneficio de la humanidad y del medio ambiente, añade.

Fuente: Rpp